HOY PRESENTA SU NUEVO LIBRO
Pilar Sordo: “Envejecemos como vivimos"
La escritora chilena habla de la vejez en Hispanoamérica y el miedo a ganar años. Da pautas de cómo disfrutar de las canas.
Si algo caracteriza a esta época es su afán por borrar todo signo del paso del tiempo. Gran cantidad de cirugías estéticas, abuelas que obligan a sus nietos a llamarlas por su nombre de pila, tortas de cumpleaños sin velas o gente que celebra cuando aparenta menos edad de la que tiene; todos ellos son tips que retratan lo que la psicóloga chilena Pilar Sordo sintetiza en el titulo de su último libro No quiero envejecer.
Tras haber alcanzado notoriedad con ¡Viva la diferencia! y No quiero crecer, el próximo 21 de mayo, Sordo se presentará en la Unión Obrera Metalúrgica de La Matanza y charlará sobre su último libro, en el que cuestiona el rechazo al envejecimiento.
Por lo general, la gente piensa en la palabra “viejo” como si fuera un insulto que tilda a los que llegan a determinada edad. Sordo decidió estudiar el tema. “Luego de investigar durante cuatro años en varios países hispanohablantes, fueron un argentino de 89 años y un colombiano de 93 quienes me permitieron llegar a la conclusión de que, hoy, viejo es aquel a quien le ganan los recuerdos en vez de los proyectos”, dice buscando describir el concepto y, luego, cuenta su experiencia en países como Colombia y Ecuador, donde “hacerse viejo es ganar en plenitud, posibilidad de descanso y desfachatez”. Sin embargo, según su sondeo, hay otros países en los que el envejecimiento “es una pérdida de cosas como belleza, salud o sexo”.
En un mundo donde lo físico es fundamental, a Pilar Sordo le molesta que no le reconozcan sus 48 años: “¡¿Por qué me quitan lo que he transitado?!”, se pregunta y enuncia que los años deberían notársele “en la cara, en la cola y en las lolas”. En su verborragia, deja bien claro que su objetivo en la vida es “andar con la experiencia caminada y aprender de las vivencias acumuladas”.
La psicóloga también se queja de los abuelos que piden a sus nietos que los llamen por el nombre. Para ella, “no hay cosa más linda que la palabra ‘abuela’”, aunque no entiende “por qué hay tan poco homenaje al acto de estar vivos ni por qué la gente se niega a vivir”.
“Según lo que pude investigar, envejecemos como vivimos; por eso, creo que hay que aprender a cuidar los afectos y a expresar la vulnerabilidad”, concluy
Tras haber alcanzado notoriedad con ¡Viva la diferencia! y No quiero crecer, el próximo 21 de mayo, Sordo se presentará en la Unión Obrera Metalúrgica de La Matanza y charlará sobre su último libro, en el que cuestiona el rechazo al envejecimiento.
Por lo general, la gente piensa en la palabra “viejo” como si fuera un insulto que tilda a los que llegan a determinada edad. Sordo decidió estudiar el tema. “Luego de investigar durante cuatro años en varios países hispanohablantes, fueron un argentino de 89 años y un colombiano de 93 quienes me permitieron llegar a la conclusión de que, hoy, viejo es aquel a quien le ganan los recuerdos en vez de los proyectos”, dice buscando describir el concepto y, luego, cuenta su experiencia en países como Colombia y Ecuador, donde “hacerse viejo es ganar en plenitud, posibilidad de descanso y desfachatez”. Sin embargo, según su sondeo, hay otros países en los que el envejecimiento “es una pérdida de cosas como belleza, salud o sexo”.
En un mundo donde lo físico es fundamental, a Pilar Sordo le molesta que no le reconozcan sus 48 años: “¡¿Por qué me quitan lo que he transitado?!”, se pregunta y enuncia que los años deberían notársele “en la cara, en la cola y en las lolas”. En su verborragia, deja bien claro que su objetivo en la vida es “andar con la experiencia caminada y aprender de las vivencias acumuladas”.
La psicóloga también se queja de los abuelos que piden a sus nietos que los llamen por el nombre. Para ella, “no hay cosa más linda que la palabra ‘abuela’”, aunque no entiende “por qué hay tan poco homenaje al acto de estar vivos ni por qué la gente se niega a vivir”.
“Según lo que pude investigar, envejecemos como vivimos; por eso, creo que hay que aprender a cuidar los afectos y a expresar la vulnerabilidad”, concluy
Una vida en letras
Pilar Sordo es psicóloga, ensayista y escritora, aunque ella misma no se defina así y diga que “escritor es quien crea”, y que ella solo se limita a transcribir. Cercana a los 50 años, escribió seis libros, algunos con mucho éxito, y brinda conferencias que bordean la autoayuda por toda Hispanoamérica.
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